Tantita madre 2: Carta abierta a los Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ¿1,227 salarios mínimos no les alcanza para vivir bien?






Estimados Ministros.

Deseo expresar, primero, mi respeto a la labor del cargo que representan y me refiero al cargo porque como servidores públicos y seres humanos su proceder ha dejado mucho que desear.

En este mismo espacio le dediqué la carta abierta "se trata de dignidad para todos" al Ministro Presidente Luis María Aguilar en la que expresaba mi pensar y sentir sobre su discurso en el "Día del Abogado" cuando defendió por primera vez los sueldos del Poder Judicial y sus exageradas prestaciones y sí, estimados Ministros, exageradas, pues ¿qué servidor público en el mundo recibe ayuda de despensa, ayuda para anteojos, vales de gasolina y demás con los abultados salarios que tienen?


En aquel día el Ministro Aguilar dijo que sus sueldos eran necesarios para desempeñar su trabajo de forma imparcial, libre, eficiente y sin presiones, sin embargo, han tomado medidas que están bastante alejadas, por decir lo menos, de los argumentos con los que justifican tan generosos salarios y prestaciones. Aquí algunos ejemplos:

* Le concedieron un amparo al ex-presidente Peña Nieto y a miembros de su gabinete para no ser juzgados en el Estado de Chihuahua.

* Cuando el ex-presidente Zedillo fue denunciado ante la Corte Penal Internacional por las matanzas de Acteal y Aguasblancas en el Estado de Chiapas durante su sexenio y él, a su vez, pidió inmunidad diplomática al gobierno de los Estados Unidos de América en su calidad de ex-jefe de Estado, no manifestaron postura alguna.

* Un juez federal sacó por "mal procedimiento" al narcotraficante Rafael Caro Quintero, mismo por el que se solicitó una orden de aprehensión casi de inmediato que salió. Hoy es un prófugo de la justicia y no se sabe su paradero.

* La ridícula sentencia de Javier Duarte por el desvío de cientos de miles de millones de pesos del erario público del Estado de Veracruz.

* El amparo por tiempo indefinido que concedieron a Emilio Lozoya para no ser investigado por el caso Odebrecht.

* La excarcelación de Elba Esther Gordillo por inconsistencia y falta de pruebas.

Y qué decirles de...

* El FOBAPROA que herdó Salinas.

* La guerra contra el narco de Calderón y la creciente violencia con Peña Nieto.

* La desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa que son tan solo la punta del iceberg de un sinfín de desapariciones forzadas.

* Los tráficos de influencias para que empresarios obtuvieran obras públicas, muchos que terminaron en  ecocidios de terrenos como el Lago de Texcoco (Nuevo Aeropuerto), el manglar Tajamar (complejo hotelero) y el Río Sonora (industria minera de Grupo México) y un larguísimo etc.

Por tal motivo y sin tener una basta experiencia en terreno de la abogacía, pues no soy Licenciado en Derecho, entenderán que me indigna el hecho de que, no conformes con no querer bajar sus sueldos para ajustarse a la compleja realidad del México de hoy, todavía digan que se lo merecen y que, incluso, llegaran al absurdo de exigir una disculpa por afirmar que ganan $600 mil mensuales cuando en realidad cobran tan solo arribita de los $570 mil.


El colmo, respetables Ministros, llegó el día de ayer lunes cuando el Presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos salió a defender la autonomía e independencia del Poder Judicial (lo que "casualmente" implica tener un sueldo decoroso).


Ahora les pregunto... ¿han hecho algo para que todos los mexicanos podamos acceder a este nivel de decoro que ustedes defienden? Les explico.

Un mexicano que cobra el salario mínimo percibe mensualmente $2,640 más prestaciones de ley (seguridad social, vacaciones, aguinaldo, reparto de utilidades) y ni un centavo más; ahora, si la canasta básica cuesta al rededor de $3,300 pienso que está por demás explicar por qué el salario mínimo, por el que NUNCA JAMÁS han abogado, viola los derechos humanos de quien lo percibe, pues no alcanza ni para lo mínimo para poder vivir decorosamente.

Precios finales de la canasta básica

Por otro lado, ustedes abanderan la causa de quienes "injustamente" ven amenazado su derecho humano a tener un nivel de vida decoroso, producto de la percepción de un salario, por no poder cobrar arriba de los $108 mil mensuales y pienso que no están de acuerdo porque tendrían que reducir notablemente el tren de vida que actualmente llevan, pero les tengo noticias, los mexicanos promedio TODO EL TIEMPO TENEMOS QUE AJUSTAR NUESTRO TREN DE VIDA PORQUE EL PODER ADQUISITIVO DEL SALARIO ES CADA VEZ MENOR.

Por último, estoy de acuerdo con el hecho de que es imperativo cumplir con la ley, sin embargo, les comento tres detalles:

Primero. Cuando se quiso normar el Artículo 127° Constitucional que dice que nadie podrá ganar más que el Presidente de la República, se dieron el lujo de congelar la Ley de Remuneraciones de los Servidores Públicos para que, ajustados a Derecho, todos los servidores públicos pudieran tener un salario decente con prestaciones justas y, al mismo tiempo, cooperar con las necesidades sociales que tanto urge resolver.


Segundo. Se escudan diciendo que según la Constitución, sus salarios no pueden ser disminuidos durante el tiempo de su encargo, sin embargo, la misma Carta Magna también dice que el interés público está por encima de todo y es precisamente de interés público el cubrir con las necesidades sociales a diferentes niveles para que todos, EN SERIO TODOS, podamos tener acceso a ese nivel de vida decoroso que ustedes tanto defienden.


Y tercero. Estoy de acuerdo con lo anterior, si está en la ley se tiene que cumplir, sin embargo y muy a pesar de todo, el hecho de ajustar sus sueldos, prestaciones y condiciones laborales sin que se lleguen a infringir sus derechos no se trata solo de aplicar las normas y reglas vigentes, sino de tener TANTITA MADRE pues tenemos más de 50 millones de pobres, 10 millones de ellos en pobreza extrema y el grueso de los mexicanos no percibimos arriba de los 3 salarios mínimos, es decir, unos $7,900 mensuales.


En serio, Señores Ministros TENGAN TANTITA MADRE y éntrenle a la austeridad, después de todo si más de la mitad de los mexicanos vivimos con 3 salario mínimos o menos, bien se pueden ajustar a un aproximado de 1,227 salarios mínimos (409 veces lo que percibe quien esto escribe) que equivalen a $107 mil 976 pesos al mes ¿o me van a decir que con eso no se puede vivir decorosamente?

Se despide su servidor y amigo. <





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